Presión arterial alta en personas mayores

Presión arterial alta… Dos palabras que causan terror entre cualquier rango de edad de la población-pero especialmente entre los adultos mayores. Y es algo común ya que tener la presión arterial normal en personas mayores es vital para asegurar su bienestar.

Pero, ¿sabías que con la edad la tensión arterial tiende a aumentar? Así es, por lo que, aunque requiere tratamiento, se trata de una condición normal. ¿Quieres saber más sobre cuál es la presión arterial normal en personas mayores? Hoy te contamos algunas claves, aunque, como sabes, la última palabra siempre la tiene tu médico. No te lo pierdas.

Antes de nada…

¿Qué es la presión arterial y cuál es la tensión normal en personas mayores?

La presión arterial es aquella ejercida por el corazón sobre las arterias cuando bombea la sangre.

Para medir esta presión, se utiliza la unidad de medida milímetros de mercurio o mmHg

Así, existen dos tipos principales de presión: la presión arterial sistólica y diastólica, midiendo la mínima y la máxima.

La presión arterial sistólica se produce en la sístole o contracción del corazón: esto produce una presión máxima sobre las arterias.

En cuanto a la presión diastólica, se produce en el momento de la descontracción del corazón, llegando los valores de presión al mínimo.

El incremento de la presión sistólica por encima de los valores estándar por rango de edad puede indicar otra condición subyacente, por lo que conviene tomar medidas

 

Presión arterial normal en personas mayores de 70 años

Hablar de presión arterial en personas mayores  de 70 no siempre es un indicador de un problema de salud. Ya que a partir de los 65-70 años, los valores de la presión arterial sistólica tienden a aumentar. En cuanto a la diastólica, se mantienen con los mismos valores.

Unos de las principales consecuencias del envejecimiento es el incremento de la presión arterial de contracción o sistólica

Los valores de tensión normal en personas mayores puede ubicarse por encima de 90 mmHg. Un indicador de hipertensión en adultos sanos, pero en ancianos puede no ser un motivo de alarma.

Dicho esto, aunque esta sea una presión arterial normal para personas mayores de 70 años, es necesario tomar medidas con la medicación adecuada. Ya que esta hipertensión incide en la calidad de vida, provocando debilidad y mareos y con efectos más graves como riesgos coronarios o cerebrovasculares.

En cuanto a la presión arterial normal en personas mayores sanas, esta no debe ser inferior a 150/90 mmHg.

Causas de la presión arterial alta en personas mayores de 65-70 años

En personas mayores de 65-70 años, tal y como te comentábamos, presentar una presión arterial alta es consecuencia de la edad, sin embargo, si no existe una condición de base coronaria u otra que cause hipertensión, la neumonía, las emociones o la interacción con ciertos medicamentos puede causar una hipertensión en ancianos.

Esperamos que estas claves te ayuden a entender un poco más la presión arterial en personas mayores de 70 años. Aunque, como sabes, esta información no debe sustituir el diagnóstico y tratamiento de un profesional médico.

Si quieres saber cuál es la tensión normal de una persona mayor de 70 años o cómo medirla de manera adecuada para los ancianos y cómo bajar la presión arterial te recomendamos dirigirte a tu ambulatorio más cercano para que te den la información más adecuada para ti.

En la mayoría de los casos no hay una causa clara que cause presión arterial alta, sino que suele desarrollarse gradualmente a lo largo de muchos años.

No obstante, debemos tener en cuenta que existen dos tipos de presión arterial alta:

·         Hipertensión primaria (esencial)

La hipertensión primaria o esencial corresponde aproximadamente el 90% de los casos. Se trata de un trastorno muy heterogéneo en el que influyen múltiples genes o combinaciones genéticas.

Hay una serie de factores adquiridos o ambientales que influyen en el desarrollo de la hipertensión esencial. Entre ellos, destacan el sobrepeso y la obesidad, el sedentarismo, el consumo excesivo de sal, una dieta pobre en potasio y la ingesta excesiva de alcohol.

·         Hipertensión secundaria

En algunos casos la presión arterial alta aparece por una enfermedad subyacente. Esto es lo que se conoce como hipertensión arterial secundaria. Suele aparecer repentinamente y causa y una presión arterial más alta que la hipertensión primaria.

Diferentes trastornos y medicamentos pueden producir hipertensión secundaria:

–       Apnea del sueño

La relación entre apnea obstructiva del sueño e hipertensión es conocida desde hace varios años y actualmente se reconoce como la principal causa de la hipertensión secundaria. Entre un 30/50% de las personas que padecen hipertensión también sufren apnea del sueño. En los pacientes con hipertensión resistente el porcentaje asciende al 83%. El tratamiento de la apnea mediante CPAP, una mascarilla que aporta presión positiva durante la noche, ha demostrado ser eficaz para ayudar a controlar los niveles de tensión arterial, especialmente durante las horas de sueño.

–       Enfermedad renal

La presión arterial alta puede contraer y estrechar los vasos sanguíneos, lo que ocasionalmente los daño y debilita. Este daño se produce por todo el cuerpo y el estrechamiento reduce el flujo sanguíneo. Si se lesionan los vasos sanguíneos de los riñones, es posible que no funcionen correctamente, por lo que no pueden eliminar todas las toxinas y el exceso de líquido del cuerpo. El exceso de líquido en los vasos sanguíneos puede elevar la presión arterial aún más, empeorando la lesión. Esto puede causar insuficiencia renal.

–       Tumores de la glándula suprarrenal

Los tumores en las glándulas suprarrenales provocan una sobreproducción de cortisol, lo que eleva el riesgo de sufrir hipertensión y diabetes. Estos nódulos o tumores benignos no entrañan riesgo de cáncer, pero sí pueden provocar una sobreproducción de hormonas como el cortisol (hormona del estrés), impactando en la diabetes y la hipertensión.

–       Problemas de tiroides

Cuando se producen trastornos en el funcionamiento de la tiroides, los mecanismos reguladores de la presión arterial se alteran y puede producirse hipertensión. La hipertensión en el hipertiroidismo causa una situación de hiperactividad e hipermetabolismo (metabolismo activado al máximo). Es más frecuente la hipertensión en el hipotiroidismo; en este caso, el organismo presenta un enlentecimiento del metabolismo, aumento de peso, frío, estreñimiento y disminución del apetito y lentitud en la actividad cognitiva. La hipertensión es fundamentalmente diastólica y se corrige al tratar el déficit hormonal que causa el proceso.

–       Defectos cardíacos congénitos (de nacimiento)

Los defectos cardíacos congénitos son problemas en la estructura del corazón que se presentan al nacer. Esto ocurre cuando el corazón de un bebé no se desarrolla con normalidad durante el embarazo. Pueden cambiar la forma en que el corazón bombea la sangre, haciendo que fluya con demasiada lentitud, que vaya en la dirección contraria, o pueden bloquearla por completo. Generalmente, los bebés con estos defectos son intervenidos quirúrgicamente durante el primer año de vida. Pero, es posible que los síntomas de los defectos cardíacos más leves no se manifiesten hasta la niñez o adultez.

–       Ciertos medicamentos, como las píldoras anticonceptivas, los antigripales, los descongestionantes o analgésicos y/o drogas como la cocaína y las anfetaminas.